Little Boots y el show de los disfrazados @Plaza Condesa
Texto publicado originalmente para elfanzine.tv
Empalmada con las celebraciones de Día de Muertos, Little Boots hizo su segunda visita a la Ciudad de México para dar un set simple, corto y monótono por momentos pero que puso a bailar a la mayoría de una audiencia un poco extravagante en una noche poco común para el Plaza Condesa.
Entre disfraces infames que incluyeron hadas con sobrepeso, vestimentas sin pies ni cabeza, espartanos desnutridos, un Woody panzón y jugadores de football americano así como marineros que finalmente pudieron salir del closet sin tapujos, Victoria Christina Hesketh llegó vestida de negro y disfrazada de calavera para comulgar con un exótico público dispuesto a bailar durante todo el set y no esperar nada más que pasarla bien.
Debido a la naturaleza y simpleza de su música electro pop, a Little Boots no se le puede exigir un gran despliegue artístico o una capacidad vocal sobresaliente. Esto no interesa, ya que la chica de Blackpool hace música sin complicaciones con sencillas melodías pop que van a lo seguro entre beats y letras pegajosas que ponen a bailar a miles.
Sonaron “Stuck On Repeat” y “Every Night I Say A Prayer” para dar inicio a tan extraña noche.
Le siguió la setenterísima “Beat Beat” que fue de las que empezó a estimular a esos seres que deambulaban en el público con la libertad y seguridad, que sólo les da el Día De Muertos o Halloween ya que pueden disfrazarse y ser, aunque sea por un día, alguien diferente sin ser juzgados por el ojo prejuicioso y retrograda de las masas.
Así fue como el show y comportamiento de varios en el público, se empezó a convertir en una especie de homenaje a “Village People” en el que los arrimones entre beat y beat hicieron de éste algo más divertido.
Más allá de que teníamos otro espectáculo abajo del escenario, llegó la pegajosísima “Broken Record”, una de las más coreadas, ya que despertó el libido de los marineros que también estaban entre el respetable. Continuó “Motorway”, una de sus mejores canciones, seguida por “Superstitious Heart” que continuó con la fiesta para después entonar un buen homenaje a Donna Summer con “I Feel Love”.
“Confusion”, “Remedy” que parece la canción que Lady Gaga hubiera querido grabar y “Shake” cerraron la primera parte del set para regresar rápidamente con un encore que abarcó “New In Town” y “Headphones” en las que casi todo el público levantaba las manos y bailaba exclamando que no terminara tan perversa noche.
Lamentablemente el espartano desnutrido, el Woody borracho, el quarterback libidinoso, el marinero perverso y las hadas con sobrepeso tendrán que guardar esos disfraces hasta el año que entra para volver a la realidad y tal vez recordar que cuando escucharon en vivo a Little Boots, fueron quienes realmente querían ser.
